El comunicado, emitido por el PP de Valencia hace unos minutos y, que asimismo ha presentado un escrito en el mismo sentido ante el Ayuntamiento de San Antonio, es claro aunque tardio:
'El Partido Popular de la provincia de Valencia informa de que las concejalas del municipio de San Antonio de Benagéber Encarnación Regalado y María José Rico ya no forman parte del Partido Popular.
Las edilas han sido expulsadas del partido como consecuencia de su empeño en seguir adelante con la moción de censura presentada contra el alcalde del municipio, contraviniendo así una orden expresa del PPVAL, el cual no comparte la decisión tomada por las mismas.
El PPVAL reitera su posicionamiento en contra de dicha moción de censura y se desvincula de las acciones que al respecto han emprendido las citadas concejalas, quienes en estos momentos ya han sido dadas de baja de militancia del Partido Popular'.
Con esto, de mantenerse la moción y según ha podio saber Crónica Digital de medios jurídicos, el Pleno de mañana deberá tener en cuenta esta nueva situación porque la Moción de Censura ya no reúne los requisitos legales que establece el artículo 197 de la LOREG (Ley Orgánica de Régimen Electoral General)
d) El Pleno será presidido por una Mesa de edad, integrada por los concejales de mayor y menor edad de los presentes, excluidos el Alcalde y el candidato a la Alcaldía, actuando como Secretario el que lo sea de la Corporación, quien acreditará tal circunstancia.
e) La Mesa se limitará a dar lectura a la moción de censura, constatando para poder seguir con su tramitación que en ese mismo momento se mantienen los requisitos exigidos en los tres párrafos del apartado a), dando la palabra, en su caso, durante un breve tiempo, si estuvieren presentes, al candidato a la Alcaldía, al Alcalde y a los Portavoces de los grupos municipales, y a someter a votación la moción de censura.
Le letra a) a la que se refiere al número de miembros que son 7 en San Antonio para la mayoría absoluta y que ahora ya no se cumplen:
a) La moción de censura deberá ser propuesta, al menos, por la mayoría absoluta del número legal de miembros de la Corporación y habrá de incluir un candidato a la Alcaldía, pudiendo serlo cualquier Concejal cuya aceptación expresa conste en el escrito de proposición de la moción.
En el caso de que alguno de los proponentes de la moción de censura formara o haya formado parte del grupo político municipal al que pertenece el Alcalde cuya censura se propone, la mayoría exigida en el párrafo anterior se verá incrementada en el mismo número de concejales que se encuentren en tales circunstancias.
Este mismo supuesto será de aplicación cuando alguno de los concejales proponentes de la moción haya dejado de pertenecer, por cualquier causa, al grupo político municipal al que se adscribió al inicio de su mandato'
Tras la expulsión y la comunicación al Ayuntamiento por el Registro de Entrada, es el Secretario y la Mesa de Edad la que tendrá que darse por enterada de la expulsión y no podrá seguir adelante con la Moción porque ya no se cumplen los requisitos legales. Según nos informan fuentes jurídicas, de no hacerlo así estarian incurriendo en un delito de prevaricación, tanto la mesa como el secretario si no informa en ese sentido.
El conflicto creado dejaría al alcalde electo en una situación provisional, pendiente de la resolución por los Tribunales Contencioso Administrativos. Inestabilidad política, institucional que todo el mundo supone que no aceptará el representante de GuanyemSAB, Ramón Orozco, quien sería investido con el apoyo de dos tránsfugas y su mandato duraría el tiempo en que tardaran los Tribunales en pronunciarse.
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